Conmovedora historia de amor: cuando la esposa de este hombre de 84 años perdió la vista, él aprendió a maquillarla.
Des y Mona Monahan son una pareja irlandesa que lleva más de 56 años juntos. Des tiene 84 años y su esposa tiene un año menos: 83.
Desafortunadamente, en su familia ocurrió un desastre: Mona comenzó a perder la vista y pronto se quedaría completamente ciega. Así que solo podía depender de la ayuda de su esposo en todo.
Su ojo izquierdo no ve nada. Y hoy en día, la mujer ya no puede hacer muchas cosas que solía hacer, una de las cuales es maquillarse por la mañana.
Cuando la vista de Mona apenas comenzaba a disminuir, Des, a solicitud de su esposa, simplemente la ayudaba a arreglarse el maquillaje.
Pero con el tiempo, la situación empeoró, Mona ya no podía maquillarse sola.
Además, las manos de la mujer comenzaron a temblar, lo que simplemente hacía imposible sostener los pinceles.
Mona lloraba a menudo por su impotencia. Por lo tanto, para apoyar de alguna manera a su amada esposa, Des decidió aprender a maquillarse.
Un día, Des fue al centro comercial local, donde en la sección de maquillaje le contó a la maquilladora profesional Rosie O’Driscoll lo que había sucedido en su familia y por qué quería aprender a maquillarse.
Esta historia conmovió mucho a Rosie, y ella aceptó con gusto ayudarlo.
Durante los 8 meses, la mujer enseñó a Des el arte del maquillaje: cómo entender los pinceles, aplicar el maquillaje de manera constante y combinar las sombras.
Ahora el hombre sabe cómo ocultar imperfecciones y resaltar las cualidades de su esposa.
Según Rosie, Des incluso ha desarrollado algunas preferencias.
Por ejemplo, prefiere hacer las cejas no con sombras, sino con un lápiz. Y si no le gusta la apariencia de un tono específico de lápiz labial que Rosie sugiere, entonces pide que lo cambien.
Des cree que él sabe mejor qué le queda bien a su esposa y qué no.
Al aplicar el maquillaje, ella y Mona siguen la regla de oro: menos es más.
«Piensa que soy hermosa tal como soy», comenta Mona. La mujer está increíblemente agradecida con su esposo, porque gracias a él se siente hermosa.
La conmovedora historia de Des y Mona llegó al maquillador de Kim Kardashian, Mario Dedivanovic.
Se conmovió por el gesto que Des eligió para su amada esposa, y Mario invitó a la pareja y a la maquilladora Rosie a su clase magistral en Londres.
«¡Esto es un gran evento para nosotros! Maquillaje profesional, Mario y Kardashian: todo esto estaba completamente fuera de nuestra vida hasta este punto», comparte sus impresiones Mona.
El ejemplo de Des y Mona demuestra que el verdadero amor puede superar cualquier dificultad. Después de todo, si tienen el uno al otro, siempre hay alguien en quien confiar.